Translate

miércoles, 14 de marzo de 2012

Tu soledad

I


De pronto, tu soledad arrasó, la puerta arañando mi karma
quedo en girones un sueño, descarnando la brisa de tu mañana,
arremetieron los demonios de la casta exacerbada de ausencia
y tu ojos lastimados, hirieron a fuego lento con su mirada.
De nada sirvió la barcaza que mi desesperación generaba
libere a pecho abierto los gorriones del alba,
beso comprometido con la sangre de la esperanza,
suspiro matutino que la palabra amor sembraba.
Mas arremetieron cual cascada tus lágrimas
desenfrenó duelo el caudal de una armonía desesperada
se adentraron los demonios cohesionando mi templanza
lloró conmigo la noche en una copa de bayas.
La soledad brindo tu herida, la abandono en mi casa
tu ira bailo conmigo, hasta desgarrarme el alma,
me quede en un suspiro prendido cual broche a mi calma
mientras un café se pierde, en una mesa del mañana.

II

Navego en mi desierto tu soledad en llamas
hiriendo los pensamientos cálidos de la mañana
hoja a hoja desangro el espíritu indomable la cascada
cual si fuese un libro que desmontara el alba.
Los secretos de tu boca me partieron el alma,
a solas quedo la vida obnubilada en mil lagrimas,
tallé la risa de tu desconsuelo, en mi mirada
el Ángel viajo ciego por mi horizonte y su mañana.
Viajo por limbos arcaicos de quebradas malogradas
donde funden los sueños temidos de la desesperanza,
para variar el eco agónico de una pisada,
entre dos besos ausentes, la ausencia y la nada.

jueves, 8 de marzo de 2012

lontananza

Cuando me negaste en este beso pensaste en el tiempo dado,
en las noches de ausencia en que te buscaron mis manos,
acaso por un instante viste, el vestir ajado de la noche por mis pasos,
la mirada inquieta, el latir apurado, al buscarte entre mis desvelos.
Dijiste amor, más por el ojo de una aguja se cerró el paso de tu palabra
nada diste de lo que yo he dado, no fuiste entrega, ni pan diario.
Yo me transformé en agua en noches de sed para tus labios
acuné tus sueños cual si fueses niño asustado,
otorgué mi alma en cada beso desenfrenado
te di mi vida como ofrenda; amor entregado,
pasé las pruebas que la vida nos fue otorgando.
Pero el silencio quebró rama de este gentil árbol
no dejó bosquejo para recuerdo, tan solo un sentir amargo
hoy, las notas de mi canción ya no te evocan
la pluma le negó a la musa la danza para tu mañana
tu reproche me suena ajeno cual invierno y sus tormentos
desaprueba el rio, el verde, el sueño de mis palabras,
la ausencia solo produce censuras a un ángel y su mirada
figura emerge en la lontananza del sentir febril de un beso ausente.